La artillería naval es el conjunto de armas de guerra de un buque pensadas para disparar a largas distancias empleando una carga explosiva impulsora.
DON JAIME JANER ROBINSON.- Capitán de Corbeta.
Janer nació en la ciudad de Savannah, en el estado de Georgia en los EE.UU., al ser su padre, Federico Janer y Macías, cónsul de España en dicha ciudad portuaria, su madre fue Ana Robinson, hija de emigrantes irlandeses. Ingresa por oposición en la Escuela Naval el 1 de Mayo de 1899, consiguiendo el grado de alférez de fragata en 1904, y al siguiente año ascendió a Alférez de Navío. Decidió cursar estudios, realizando curso en la Escuela de Torpedos (Armas Submarinas) de Cartagena, donde se familiarizó con aparatos eléctricos, explosivos y otras cuestiones, para posteriormente obtener el título de ingeniero torpedista y electricista, redondeando sus estudios con los de la Escuela de Artillería de Costa, entonces en la vanguardia de esas técnicas.
Algunos de los inventos y estudios que realizó Janer en esos sus primeros años, fueron:
LA TELEGRAFÍA SIN HILOS.-
No cabe duda de que fue el italiano Marconi el que logró hacerse con la paternidad del invento y con su desarrollo industrial y aplicación, tras su éxito en el primer mensaje trasatlántico de 1901. En España la nueva técnica tuvo uno de sus primeros logros con la instalación el 5 de mayo de 1903 de un equipo en el vapor Giralda, yate real que había sido adquirido en Gran Bretaña. Janer, ya en 1905, no dudó en traducir una obra inglesa entonces básica, la Wireless Telegraphy, realmente un manual de instrucciones, al que completó con toda una descripción de la teoría, técnica y funcionamiento de los aparatos. El mérito de la obra era inmenso, como recordaba la comisión de la Armada que la examinó y aprobó, ya que entonces ni siquiera existían en castellano palabras para designar aparatos, mecanismos y operaciones, y tuvieron que ser ideadas por el propio Janer, se dijo que su parte personal no era imprescindible y se pusieron problemas para su edición, aunque la consiguió finalmente en 1906.
EL TORPEDO DIRIGIDO A DISTANCIA.-
En 1906 presentaba a la superioridad su proyecto de un torpedo dirigido por ondas hertzianas, paralelamente a la propuesta de Torres Quevedo de aquel mismo año, basada en su famoso “telekino”, primer mando a distancia del mundo, pero ambos fueron rechazados por comisiones que, según se demuestra en la lectura de sus escritos, tenían serias dificultades para entender lo que habían inventado y lo que se proponían ambos genios.
LA PRIMERA DIRECCIÓN DE TIRO.-
Pese al avance sensacional en cañones y proyectiles, que podían alcanzar más de diez mil metros, los métodos de puntería apenas habían avanzado desde Trafalgar, con lo que la distancia a que se podía hacer razonablemente blanco, y eso tras de un enorme gasto de costosisimas municiones, era de entre dos y tres mil metros. Todo se reducía a que un oficial, utilizando un telémetro óptico, calculaba aproximadamente la distancia al objetivo, y por medio de la voz o de toques de corneta transmitía ese dato a las piezas y estas ajustaban así su tiro. Janer presentaba el 23 de octubre de 1907 su proyecto de una dirección de tiro, con aparatos eléctricos, luces y pulsadores que permitían transmitir a las piezas con toda comodidad, seguridad y rapidez no solo los datos de distancia, sino otros imprescindibles para el tiro.
Era un gran desarrollo de la idea que esbozó Joaquín Bustamante poco antes de morir heroicamente en 1898, y es de destacar que este gran marino e inventor era primo hermano de Torres Quevedo. Janer había experimentado con todo éxito, valiéndose de materiales de fortuna aportados por él mismo o por compañeros, y con la colaboración de sus comandantes, el nuevo sistema en el Giralda y en el cañonero Nueva España. Pero de nuevo se le negó cualquier apoyo, o se retrasó, aduciendo nimiedades como la verificación oficial de su sistema, prefiriendo los británicos, muy inferiores y mucho más caros. Pero Janer tuvo paciencia y supo continuar esta batalla hasta ganarla.
Formó parte de la entonces recién creada Liga Marítima, defensora e impulsora no solo de la reconstrucción de la Armada, sino de todas las actividades marítimas españolas, desde los astilleros y el negocio naviero a la pesca y actividades deportivas. Comenzó así sus frecuentes colaboraciones en la revista de la Liga, Vida Marítima, y en todas sus actividades, publicando un libro de relatos de ambiente marítimo que se entregó como premio a los alumnos más aplicados en los cursos organizados por la Liga, De terra et mare, prologado por el almirante Auñón.
Fue destinado al acorazado España, primero de los dreadnoughts españoles, buques que llevaban su artillería principal del mismo calibre, justamente para aprovechar los nuevos sistemas de tiro y poder batir eficazmente a sus predecesores desde distancias de más del triple que las anteriores y con mucha mayor contundencia. Entonces, y como director de tiro del acorazado, resultaron evidentes las ventajas de todos sus estudios y trabajos previos sobre las modernas direcciones de tiro, control de fuego y correcciones.
Publicó en 1915 nada menos que tres manuales sobre el nuevo tiro naval, e incorporó los avances y experiencias de la Primera Guerra Mundial, y su gran obra Balística Exterior: telemetría y tiro naval, completada con una colección de tablas para el cálculo, que fue la obra clásica durante muchos años sobre la cuestión.
Un ya consagrado Janer recibió el encargo, tras largas propuestas por su parte, de crear una nueva Escuela y Polígono de Tiro Naval, donde los Oficiales se especialicen en Artillería, para lo que eligió la entonces pequeña villa pesquera de Marín, en Pontevedra de la que fue su fundador y director, a la vanguardia de la técnica mundial.
POLÍGONO DE TIRO NAVAL (MARIN)
CURSO II, AÑO 1.922.
1.- T. de N. D. Manuel Arnaiz Torrez.
2.- C. de C. D. Rafael García Rodríguez.
3.- C. de C. D. Jaime Janer Robinson
4.- C. de C. D. José Mª Villena.
5.- C. de C. D. Angel Suances Piñeiro
6.- C. de C. D. Francisco Moreno
Él mismo eligió los terrenos, dirigió las obras y se ocupó de todos los detalles, dando un gran impulso a la localidad, que le mostró su más cordial agradecimiento en muchas ocasiones.
Pronto se convirtió en uno de los centros más adelantados del mundo en esa especialidad, por donde tenían que pasar todos los buques de la Armada para su adiestramiento artillero.
CURSO XXXV, AÑO 1960. ÚLTIMO CURSO DESARROLLADO EN MARÍN ANTES DEL TRASLADO DE LA ESCUELA A SAN FERNANDO.
Muchos de sus locales e instalaciones los ha heredado la actual Escuela Naval Militar.
La guerra ardía en Marruecos, especialmente tras el Desastre de Annual de 1921, y Janer fue destinado al viejo crucero Cataluña como tercer comandante, ya ascendido a Capitán de Corbeta. En él le llegó su final frente a M’Ter, cuando el viejo crucero fue alcanzado por el disparo de un cañón marroquí emplazado en la costa, que le mató instantáneamente y causó otras graves bajas a la dotación el 3 de marzo de 1924, cuando no contaba aún cuarenta años de existencia.
Fue enterrado con todos los honores en Ceuta, mientras el Ayuntamiento de Marín, en sesión extraordinaria de 11 de marzo 1924, decidía colocar su retrato en el Salón de Plenos, poner su nombre a la avenida principal de la localidad y pedir a la Armada que trasladara sus restos al Panteón de Marinos Ilustres de San Fernando en reconocimiento a su gran labor y mérito.
Pese a algunos sentidos homenajes, como la construcción de un monumento en la misma Escuela de Tiro, las cosas se fueron dilatando. En 1943, la Escuela Naval ocupó los edificios e instalaciones de la de Tiro Naval y esta se trasladó a San Fernando.
Hasta marzo de 1966, y por iniciativa del entonces ministro de Marina almirante Pedro Nieto Antúnez, que había sido profesor en la Escuela de Tiro, se llevó a cabo el solemne traslado de los restos de Janer al Panteón de Marinos Ilustres de San Fernando, conducidos desde Ceuta a bordo de la fragata Vicente Yáñez Pinzón.
La Escuela de Tiro fundada y dirigida por Janer, tuvo otras ubicaciones tales como Sóller (Mallorca) en 1936. Crucero “Canarias”, y volvió a Marín 1944, pero ya compartiendo instalaciones con lo que actualmente es hoy la Escuela Naval Militar que fue trasladada en 1943. Allí continuó su labor docente hasta que en 1960 se ordena su traslado a San Fernando (Cádiz) para ocupar los terrenos de la antigua Batería de la Ardila.
BIBLIOGRAFÍA:
AGUSTÍN RAMÓN RODRÍGUEZ GONZÁLEZ: VIDA Y OBRA DE JAIME JANER ROBINSON
ESPEJO DE NAVEGANTES. Blog de arqueologia Naval. http://abcblogs.abc.es/espejo-de-navegantes/2014/05/04/jaime-janer-robinson-un-gran-marino-ilustrado/